Ya he comentado que el sistema se rompió en 2008 y desde entonces vivimos con "respiración asistida", monitoreada por los BC.
En 2019 tuvimos otro episodio de desesperación con la crisis estadounidense de los repos y la FED dio carta blanca a la inyección sin límites para sostener el sistema. Después de esta pequeña crisis, apareció la pandemia, lo que requirió todo tipo de esfuerzos monetarios para evitar la "defunción del enfermo".
Esta vez la recuperación trajo efectos secundarios como la alta inflación y la subida de tipos aparejada para intentar contenerla. Tampoco ayudó la crisis energética producto de las sanciones al gas barato ruso. Luego se ha visto que las sanciones perjudicaron más a los impositores que a los sufridores, pero ya no importa ...
La sucesión de crisis en la década de 2020 es solo el reflejo de una pre-crisis, donde sabemos que todo se ha roto, pero tenemos que mantener el entramado mientras diseñamos una solución. Se puede apuntar las características de la "solución" en este resumen dividido por puntos.
1º). Deslocalización y guerras comerciales.
Hemos llegado a 2025 y parte de la solución se llama deslocalización. EE.UU. ha decidido romper con todo para salvar su parte del pastel mundial.
Pueden encontrar un análisis pormenorizado sobre lo que se espera en 2025, en este artículo de Michael Roberts. Durante mucho tiempo, el comercio mundial era el impulsor del crecimiento mundial. Pero como he comentado antes, la crisis de 2008 rompió el sistema de "crecimiento" y la actividad comercial fue la primera en sentirlo.
Un extracto del artículo anterior explica el descenso de la actividad comercial como impulsor del PIB mundial.
"¿Cuáles son los principales factores económicos que pueden ayudarnos a evaluar el desempeño de las principales economías en 2025? El primero es el comercio internacional. Entre 1995 y 2007, el comercio creció al doble de la tasa del PIB mundial. Pero desde la crisis financiera de 2008-2009, el crecimiento del comercio en relación con el PIB se ha estancado. Los planes de Trump, de implementarse (lo que sigue siendo incierto), acelerarían la desglobalización y el estancamiento del comercio mundial, afectando particularmente a las economías del Sur Global. El habitualmente optimista banco de inversión Goldman Sachs predice un impacto significativo en el PIB de EE.UU. si se aplica un arancel del 10% a todos los bienes importados, en parte debido al aumento de los precios de consumo, lo que reduciría el gasto de los estadounidenses. Y "esto podría dar lugar a una guerra comercial mundial que, aunque podría adoptar muchas formas, en casos extremos podría restar entre un 2 y un 3% del PIB mundial", afirmó la consultora Capital Economics. Según las previsiones actuales, una caída del 3% en la producción mundial anularía la previsión de crecimiento económico para 2025."
Tras la imposición de aranceles, toca negociar como se va a distribuir el comercio mundial, pero siempre con aranceles de base superiores a los vigentes hasta 2025, lo que va a suponer un descenso de la actividad comercial y como dice el artículo, una posible caída del 3% en la producción mundial, lo que anularía todo crecimiento.
En este sentido, la intención es la mejora de ciertos países (USA) mientras empeora el resto.
2º) Guerras militares.
Tenemos en marcha varios conflictos.
Ucrania-OTAN-Rusia.
Gaza-Israel-Yemen-Irán.
Pakistán-India (recientemente frenado, pero India mantiene el control de las aguas)
Luchas tribales en toda África.
En este contexto, la OTAN se descuelga con la necesidad de incrementar el gasto militar hasta un increíble 5% del PIB.
https://www.eleconomista.es/mercados-cotizaciones/noticias/13366144/05/25/la-otan-desata-la-euforia-en-la-industria-de-la-guerra-la-alianza-exige-un-5-del-gasto-del-pib.html
Desde un exiguo 2%, se debe pasar a un 5% y además de forma inmediata. Ya nos explicarán por qué es imprescindible, pero podemos suponer que la lucha por los recursos necesita unos ejércitos fuertes para imponer la colonización y una confiscación de las materias primas necesarias.
3º). Escasez de materias primas.
Los dos primeros puntos aluden a guerras. La razón es la propia supervivencia.
Mientras la abundancia ha proporcionado suficientes materias primas baratas, nadie ha pensado en la necesidad de coartar el comercio mundial, ni en conseguir ciertos elementos vitales para el sistema. El petróleo y el cobre son las principales materias primas que se necesitan para sostener un sistema de transporte fósil o eléctrico.
No solo es necesaria la extracción de estos materiales, sino que además se precisa refinarlos. La industria del refino de petróleo está ampliamente representada en Occidente, pero el refino del cobre y el resto de materias primas básicas como el aluminio, están centradas en China.
La relocalización de la industria en Occidente, no solo va a requerir el traslado físico de las fábricas y trabajadores, sino que toda una industria del refino, con una gran intensidad energética, debe también emprender el traslado. No se puede construir nada, sin los materiales básicos refinados.
Este punto no solo incluye la necesidad de conseguir materias primas escasas (sea con negociaciones como la reciente gira de Trump por Oriente Medio o por la fuerza, punto relacionado con el anterior), sino también la creación de una amplia infraestructura de refino de minerales-metales.
4º). Control digital de la población.
La era digital va a proporcionar suficientes herramientas para conseguir un control absoluto de la población. Antes era suficiente con manejar los medios de comunicación, pero las redes sociales han pervertido la situación haciendo ineficiente e insuficiente, el control de los medios.
Ahora se necesita elevar la posición de control y la moneda digital, junto con el pasaporte digital, son los medios preferidos. nadie se puede mover si la cuenta del dinero no está disponible. La desaparición del efectivo, incauta las posibilidades de libertad al permitir controlar no solo la disponibilidad del dinero (se puede imponer tasas e impuestos sin posibilidad de evasión), sino el control del consumo. El racionamiento, las restricciones, las prohibiciones son mucho más sencillas y efectivas, si el pago solo es digital. Al mismo tiempo, la movilidad con un pasaporte digital y herramientas de control facial, se puede monitorizar sin problemas en una enorme parte de la población.
Por ejemplo, el BCE quiere comenzar con el euro digital de forma inmediata. Está pidiendo la aprobación política (legislación) fulminante en Octubre de 2025, para poder desarrollar la tecnología apropiada con la mayor rapidez posible.
Mucha gente se pregunta como un descenso de la disponibilidad energética permitirá mantener un sistema digital, pero precisamente el control es lo que hace posible dirigir la energía hacia las necesidades básicas. Si se pone el control en la cima de la pirámide, los recursos energéticos se dedicarán en primer lugar a mantener intacto el nuevo sistema ..., incluso a costa de disminuir los recursos básicos de supervivencia, para la población que no pertenezca a la élite. Ya hemos visto muchas películas para formarnos una idea de como se consigue. Cualquier variante sería válida para este proceso de control.
5º). Financiación y reducción de la deuda pública.
Usando el control digital se puede conseguir reducir la deuda pública con una tasa a la riqueza privada como sugirió hace años el FMI.
La imposibilidad de eludir esa tasa (todas las cuentas y todas las transacciones estarían fiscalizadas por la digitalización), facilita la instauración de ese impuesto.
Asimismo, la financiación de los programas públicos (rearme, prestaciones sociales, servicios públicos) también entraría en este apartado. Algún ministro francés ya ha propuesto destinar el ahorro privado europeo a la financiación pública, petición muy fácil de obtener con una moneda digital.
Conclusión.
Todos estos puntos nos dirigen a una era de supervivencia, donde la lucha por los recursos y el control de la población, sean los objetivos básicos para conseguir una supervivencia más o menos prolongada, mientras las estructuras de estado siguen firmes, evitando el caos y la destrucción.
La era del crecimiento ha terminado y la década de 2020-2030 está desarrollando la transición a la era de la supervivencia.
Para caracterizar donde estamos, esta gráfica nos permite identificar el periodo actual.
El pico está delimitado entre 2019 y 2031. El punto de giro (parte superior de la curva roja) puede ser 2026-2027, y lo que viene a continuación es de sobra conocido.
La era del crecimiento es toda la parte izquierda de la curva roja. La era de la supervivencia es la parte derecha de la curva. La década actual se sitúa en la parte más alta de la curva y marca el punto más alto, sin saber si ya lo hemos alcanzado o lo haremos en breve. Las sucesivas crisis en los últimos años, solo son los indicadores de un cambio radical del sistema, que hace tiempo se puso en marcha.
Todos los gráficos actuales son semejantes a la parte izquierda de la línea roja. Crecimiento poblacional, crecimiento económico, crecimiento energético, crecimiento de la deuda y aumento de la demanda de materias primas, presentan el mismo aspecto. Hace tiempo que se propuso (límites del crecimiento) un punto de giro para este crecimiento insostenible. Se centró en la década de 2020-2030. La observación de las tendencias observadas desde 1970 hasta hoy , coincide con la teórica propuesta por la dinámica de sistemas del grupo de los Meadows.
Desde mi punto de vista, el agotamiento de los recursos es el eje director del punto de giro.
Estamos muy avanzados y las perspectivas para el petróleo y el cobre, son la punta de lanza de un cambio en la disponibilidad de recursos. Intentar consolarnos con la habilidad innata de la humanidad para mediante el uso de la tecnología, conseguir eludir todos los problemas y mantener intacto un crecimiento perpetuo, no sirve, por cuanto la tecnología no es inmaterial. Sí, tenemos un sector de servicios magnífico cuyo crecimiento mantiene a flote el PIB mundial, pero incluso el software necesita materiales para poder ser usado. Los móviles, ordenadores, IA, robótica, redes neuronales, computación cuántica, paneles solares, todo, absolutamente todo, necesita primero materias primas refinadas y estas se están acabando con demasiada rapidez. El otro día ponía el gráfico del consumo de cobre. En los últimos 25 años, hemos consumido más cobre que en toda la historia de la humanidad. No sirve tener grandes recursos de una materia prima si la demandamos a una velocidad asfixiante, necesaria para mantener el crecimiento. Hemos crecido demasiado para la cantidad de recursos finitos de bajo coste (monetario y energético). Ahora toca recorrer la parte de caída de la curva ...
En el futuro (medido en décadas no años) tendremos menos de todo y el inicio de la lucha consiste en apoderarse de la mayor parte del pastel, para sobrevivir en las mejores condiciones posibles, por supuesto, a costa del resto de la humanidad.
Cuando uno contempla el gráfico anterior, se da cuenta que el descenso es inevitable, tanto controlado como caótico. La parte derecha de la gráfica es algo totalmente desconocido, cuando las retroalimentaciones impacten en la obtención de los menguantes recursos. Incluso el intento de control puede ser insuficiente para conseguir un decrecimiento lento y ordenado.
La era de la supervivencia.
El inicio del decrecimiento pasará totalmente desapercibido y no seremos conscientes hasta que la aceleración de la velocidad de crucero del proceso, haga que todo el mundo lo note. Es muy posible que la "cocina" de las estadísticas oficiales, consiga eludir la percepción del decrecimiento y gane unos cuantos años. Las políticas de control pueden incluir racionamientos de todo tipo, con campañas como "salvar el planeta", para alejar a la opinión pública de un descenso de las materias primas básicas.
Slogan como "no tendrás nada y serás feliz", políticas como las ciudades de quince minutos, la posible eliminación del transporte privado para reducir las emisiones o la reducción de la cantidad de carne a consumir, y el uso de la IA para sustituir los empleos humanos (robótica), son ejemplos de "reducción controlada de consumo" que se verán multiplicados en el futuro, sobre todo en Occidente.
El intento de conservar el poder, incluye la prolongación de una democracia en manos de una élite dictatorial, que buscará eliminar toda oposición, para conseguir mantenerse en la cima. El manejo de la opinión pública es vital para este propósito y aprobar las leyes de desinformación (la verdad solo será ratificada y validada por la dirección política), establecer la intervención de las estadísticas oficiales, prohibir partidos extremistas manteniendo una alternancia interesada, reglar todos los procesos hasta la extenuación, y diseñar una política de control digital (junto con un ejército potente), permitirá una amplia y larga permanencia en el "poder".
El rearme acelerado (casi "cada día" nos levantamos con una nueva propuesta de más inversión en defensa) junto con las prisas por instalar la moneda digital, son un síntoma del final de un sistema que vive una "decadencia crepuscular". El "Gran Reset" se va a aplicar porque el sistema se ha roto y las maniobras para mantenerlo en pie ya no dan para más. Lo malo es que esta vez no van a diseñar un nuevo sistema que sustituya al anterior. Van a preparar una estructura de poder autárquico que mantenga la ficción de estado resiliente, con el objetivo de evitar el caos y la destrucción, mientras administran la miseria en las próximas décadas.
Solo un opinión.
PD. Al margen del cuerpo principal quería comentar el caso de la plata.
[A veces se pide mostrar el ejemplo de una sola materia prima que se esté agotando. Es una pregunta trampa, porque todos los recursos se están agotando con rapidez, pero la reducción de la concentración en las minas, permite seguir extrayendo material a un coste desorbitado. Aún así, ya tenemos el primer elemento imprescindible que ha entrado en déficit estructural (aparte del mercurio), la plata.
Este elemento es el mejor conductor de electricidad y es imprescindible en todos los aparatos y dispositivos electrónicos. Por su elevado precio, se ha intentado sustituirlo, sin conseguirlo (manteniendo su eficiencia y propiedades) hasta ahora.
Y no solo la producción minera lleva tiempo descendiendo (desde 2016), es que desde hace cinco años, el balance entre la oferta y la demanda está descompensado, con un déficit anual imparable, a pesar del aumento del reciclaje.
https://silverinstitute.org/wp-content/uploads/2025/04/World_Silver_Survey-2025.pdf]
Producción minera mundial.
https://x.com/SRSroccoReport/status/1878903593962786885
Balance hasta 2024.
- Y eso que las estimaciones de la demanda fotovoltaica son muy, muy discutibles. Aquí entra un ejemplo de como se "cocinan" las estadísticas en la dirección interesada (precios bajos para la plata).
En esta tabla se muestra la demanda esperada para la fotovoltaica tanto en 2024 como en 2025.
La instalación fotovoltaica ha crecido con mucha fuerza en 2024, pero la estimación de consumo de Metal Focus presenta una sospechosa disminución.
Según la presentación de Hecla Minig, el consumo de plata por GW se ha reducido de 0,5 millones de onzas de plata en 2023 a 0,45 millones de onzas en 2024.
Presentación Hecla Febrero de 2024.
Presentación Hecla Febrero de 2025.
Como se puede ver en los dos gráficos, la mejora en el uso de la plata por GW ha disminuido la cantidad de 0,5 millones de onzas promedio para todo 2023, hasta 0,45 millones de onzas para el promedio de 2024.
Esta cantidad corresponde a unos 14 mg /W. cantidad reconocida actualmente por la industria (una onza de plata contiene 31,1 gramos y 1 GW son 1.000.000.000 W, por si alguien quiere hacer las cuentas).
Puesto que tenemos la instalación de 597 GW en 2024, el consumo esperado de plata será :
597 GW x 0,45 millones de onzas = 269 millones de onzas
Esta estimación es más razonable , porque acompaña la reducción de plata por GW, mientras recoge el fortísimo incremento en GW instalados.
Frente a este cálculo, Metal Focus "propone" un consumo de solo 197,6 millones de onzas (casi el mismo consumo que en 2023), una desviación espectacular, que reduce el déficit físico a "solo" 117 millones de onzas, cuando debiera ser 190 millones de onzas.
Lo mismo podemos decir para las previsiones de 2025. Se queda excesivamente corto, tanto el déficit como la parte destinada a la fotovoltaica.
Recomiendo este video del canal dragon-oro de Dani, para ver que no es la única discrepancia.
https://www.youtube.com/watch?v=vD5BOwlhkVQ
- Otra "solución" que vemos repetidas veces señalada es la sustitución de un material por otro equivalente pero más abundante y barato. En el caso de la plata, ese es el cobre.
En los paneles solares, la plata es una gran inversión. Se llevan décadas intentando sustituir la plata por cobre y a pesar de todo, todavía no se ha conseguido, ¿Por qué no?
Lo mejor es leer este interesante artículo y averiguarlo.
https://pvbuzz.com/solar-industry-major-flaw-reliance-on-silver/
La empresa Sundrive mencionada en el artículo, consiguió en 2021 una eficiencia del 25,54% con Maxwell Technologies. Todavía no ha logrado ventas en escala industrial y en 2024 eliminó 35 puestos de trabajo y cambió al CEO.